Luego de cinco años de planificación, el evento “Together 2016” (“Juntos 2016”), pensado para durar 12 horas, tomó lugar el pasado sábado en la Explanada Nacional de Washington D.C., Estados Unidos. Sin embargo, las altas temperaturas impidieron que todo saliera acorde al plan y, después de siete horas de oración, debió ser cancelado.
La idea comenzó hace cinco años con un costo estimado de $10 millones de dólares, tras el llamado del ministro Nick Hall a permanecer unidos para adorar y orar. La fecha elegida no podría haber sido mejor debido a las últimas semanas de brutalidad policial, ataques contra la policía y ataques terroristas.
Hall dijo a CBN News: «Esto no se trata de personas perfectas reunidas, se trata de personas imperfectas que estamos reunidas para buscar a alguien perfecto, a Jesús”.
A pesar de que la temperatura superó los 32 grados, nada detuvo a las miles de personas que respondieron el llamado y asistieron al evento. Artistas como Hillsong United, Lecrae y Matthew West prestaron sus voces a la experiencia. «Me sentí impresionado por la multitud, sólo por el tamaño de la multitud», dijo el cantante Matthew West.
«Había cientos de miles de personas, de pie en ese lugar hoy, celebrando el Dios que perdona, el Dios que renueva y el Dios que podría curar a una nación lastimada», dijo.
Michael Robertson, que viajó de Akron, Ohio, para participar en el evento, dijo: «Me encanta que estemos juntos. Es bueno tener un vistazo de cómo podría ser el cielo algún día. Sólo un vistazo, pero cuando se llega a esto tenemos que, en un momento dado, ya sea a las nueve en punto o ahora, estar dispuestos a salir de aquí y vivirlo afuera».
Pero luego de siete horas de calor extremo, que provocó aproximadamente 400 llamadas a ambulancias por descompensaciones, la administración del sitio se vio obligada a cancelar la actividad.
El organizador de conciertos cristianos, Ryan Romeo estaba allí cuando Nick Hall dio su visión por primera vez y anunció los planes para «Together 2016” y se entristeció de ver que el evento terminara tan temprano.
«Esto es desgarrador. Cinco años en la planificación», dijo Romeo. «Eso fue algo difícil, pero hablé con uno de los líderes, me dijo que sólo tengo que confiar en que el Señor tenía algún propósito, aún con lágrimas en los ojos, que tengo que confiar en que Dios sabe lo que está haciendo, y que algo sorprendente va a suceder, a pesar de que terminó antes de tiempo».