El sol se pone sobre el Mediterráneo mientras el mar baña las costas del Norte de África. Aquí, en este lugar, ocurre algo asombroso: los musulmanes de toda esta región se convierten a la fe en Jesucristo en cifras récord.
Con respecto a esto, el cineasta Tino Qahoush dijo: “Lo que Dios está haciendo en el Norte de África, desde Mauritania hasta Libia, es algo sin precedentes en la historia de las misiones».
Tino Qahoush, graduado en la Universidad Regent, es una voz autorizada en el tema, ya que ha pasado años viajando a la región para documentar la transformación. Sobre ésto ha explicado lo siguiente: «Tengo el privilegio de grabar testimonios y escuchar historias de hombres y mujeres, de todas las edades, que sentados en un salón, ven aparecer la presencia de Dios como una visión. Algunos cuentan historias de cómo sostienen una conversación con él; de que no es sólo una luz que aparece» enfatiza.
Las entrevistas de Qahoush confirman lo que los expertos relatan de que en esa zona se vive un profundo mover de Dios. En especial, en las predominantes naciones musulmanas de Mauritania, Sahara Occidental, Marruecos, Argelia, Libia y Túnez.
«A veces siento celos de cómo Jesús visita al mundo musulmán en este tiempo. No escuchamos que ocurra lo mismo en la comunidad tradicionalmente cristiana», aseveró Qahoush.
Más y más cristianos
Desde las costas de Casablanca, en Marruecos, a Trípoli en Libia, los expertos dicen que el crecimiento del cristianismo, especialmente en los últimos 20 años, ha sido sin precedentes. Ahora, ese crecimiento es más evidente en la nación africana de Argelia, en el Norte del Continente.
De hecho, el pastor Salah enfatizó: “Nunca pensamos que la iglesia argelina crecería tanto». Este pastor lidera una de las iglesias más grandes en Argelia, donde el 99% de la población es musulmana.
También Salah dice que uno de cada nuevo cristiano en su iglesia tiene un trasfondo musulmán. Unos 1.200 creyentes asisten a la iglesia. Y relata: «Desde nuestros inicios como iglesia hasta hoy hemos bautizado alrededor de 150 a 160 creyentes por año».
Hombres como Zino, quien fue invitado a asistir a la iglesia del pastor Selah por un amigo, dijo conmovido: «Yo vi a argelinos adorar a Dios con todo su corazón y eso me tocó». Este hombre es un ex-musulmán al igual que Farhat, que hablan sobre encuentros milagrosos. El relató su propia historia: “Era analfabeto y no podía leer La Biblia. Cuando acepté al Señor Jesús, entonces Dios hizo un cambio. Desde entonces leo La Biblia y entiendo la Palabra de Dios. Esto es sólo un ejemplo de lo que Dios hizo en mi vida. Y como mi caso, hay aquí muchos similares en Argelia», relató Farhat.
Libertad religiosa
Aunque Argelia es mayoritariamente musulmán, el Gobierno brindó a las iglesias protestantes la libertad de registrar sus congregaciones. «Es el primer gobierno árabe que reconoce oficialmente a las iglesias», indicó Youssef Ourahmane, representante de Casa de Esperanza.
Youssef Ourahmane es un pastor argelino. Él dice que “El gobierno hostiga e intimida a los cristianos de vez en cuando pero, ahora no hay el nivel de persecución como había hace 20 años. Dios nos ha dado muchas oportunidades de testificar en las Estaciones de Policía, en las Cortes, y en otros lugares. Una vez fui a la Estación de Policía y me dieron 45 minutos para hablar sobre Jesús. Imaginen la situación. Todos ellos musulmanes sentados y diciéndome: ‘Háblanos de Jesús'», aseveró Ourahmane.
Pero Argelia y los países del norte de África no siempre están abiertos al evangelio. También tenemos las historias que «Peter» conoce. Él es un veterano misionero que vive aquí y por razones de seguridad se ocultó su verdadera identidad.
«Usted sabe la parábola: el sembrador salió a sembrar y la semilla cayó en pedregales… Éste es el norte de África, en esos días estaba resistente y pedregoso», expresó «Peter». «La religión y la cultura eran hostiles a cualquier cosa extranjera y el cristianismo era considerado como la religión de los europeos», explicó «Peter».
Aunque él, personalmente, cree que la llegada de la televisión y el Internet han cambiado la percepción de la gente sobre el cristianismo. Hoy, en el norte de África en la televisión se pueden escuchar a árabes cristianos hablando de su fe, cristianos maduros respondiendo preguntas, participando en debates», indicó «Peter».
Animados por el poder de Dios, los cristianos argelinos están ahora en una misión para llevar el evangelio a todos los rincones del globo.
«Dios ha puesto en nuestros corazones que enviemos a 1.000 misioneros para el año 2025. Creo que tal vez un día América tendrá numerosos misioneros convertidos del Islam al cristianismo, y ellos alcanzarán a los musulmanes de ahí y de otras partes», concluyó Ourahmane.-