La pandemia del COVID-19 ha creado nuevos retos en los esfuerzos de traducción de la Biblia alrededor del mundo, pero los Wycliffe Bible Translators USA han continuado con su misión a pesar de los retos.
Por 79 años, Wycliffe ha liderado el esfuerzo de la traducción de la Biblia a todos los idiomas. El CEO John Chestnut dijo que actualmente el grupo y sus socios están trabajando en mas de 2,700 proyectos de traducción en 167 países. Aun así, 1.5 billones de personas todavía no tienen una traducción de la Biblia en su propio idioma.
Carolina Costa la publicista de Wycliffe le dijo a The Christian Post que muchos países en los cuales trabaja Wycliffe tienen cuidado de salud muy pobre, gobiernos divididos y tecnología de comunicación limitada. La pandemia también ha impedido los esfuerzos de Wycliffe para trabajar con personas quienes hablan idiomas para los cuales no hay traducción de la Biblia.
Chestnut mencionó que para sobreponerse a estos retos Wycliffe utilizó tecnología originalmente designada para acelerar traducciones de la Biblia. En los últimos 17 años, Wycliffe incremento su taza de traducción de la Biblia de 7.5 traducciones por año a 29.4 traducciones anuales.
“Durante las dos ultimas décadas, Wycliffe hizo inversiones significativas en la tecnología para poder acelerar nuestro trabajo. Como resultado, nuestra infraestructura digital nos permite comunicar, coordinar, investigar y mantener el momento en los proyectos de traducción” dijo él. “Este fue usado para llevar un equipo de traducción a una comunidad por 30 años y terminar una traducción del Nuevo Testamento. Hoy, los proyectos son primariamente comenzados y dirigidos por iglesias locales”.
Chestnut dijo que la providencia de Dios les ha dado a los traductores Wycliffe de la Biblia alrededor del mundo oportunidades de convertir el desastre en una forma de avanzar el Evangelio. En el 2019, los misioneros Thai de Wycliffe Nate e Ivy Cheeseman comenzaron a distribuir un audio MP3 con grabaciones de la Biblia en lenguajes locales. Conforme se corrió la voz, cientos de personas pidieron Biblias en audio.
“Parecía que a donde quiera que íbamos… seguíamos conociendo personas que querían dar a conocer la Biblia”, le dijo Ivy a Wyfcliffe.
Cuando la pandemia llegó, muchas personas se volvieron creyentes después de escuchar las Biblias nuevas, dijo Cheeseman. Los nuevos cristianos recibieron el discipulado que necesitaban.
Chestnut compartió que, en Tanzania, otro equipo de traducción de Wycliffe puso en pausa su trabajo para hacer videos para las personas sordas de como seguir las recomendaciones de seguridad para el COVID-19.
“Estamos sorprendidos y nos sentimos humildes de ver como Dios continúa avanzando la traducción de la Biblia y bendiciendo este ministerio a pesar de los retos sin precedentes que trajo la pandemia”, dijo Chestnut. “Continuamos trabajando con nuestros socios para mantener los proyectos avanzando durante este tiempo hasta donde nos sea posible de una forma segura”.
La parte mas desafiante de traducir la Biblia a cada idioma es la vasta cantidad de idiomas que hay en el mundo, dijo él. A pesar de que las regiones aisladas geográficamente u hostiles hacia el cristianismo pueden hacer difícil las traducciones, la logística sigue siendo el reto más desafiante.
“Acceso a la Biblia en un lenguaje que entendemos es un regalo precioso que muchos de nosotros damos por hecho, pero 1.5 billones de personas no tienen una Biblia completa en un idioma que puedan entender mejor”, dijo Chestnut. “Nuestra visión en Wycliffe Bible Translators USA es que las personas de cada idioma entiendan la Biblia y sean transformados”.
Fuente: The Christian Post
Foto: Wycliffe Bible Translators