La Corte de los Magistrados de Bristol en Reino Unido ha condenado a dos cristianos que predicaban en las calles por ofensas al orden público, ya que dijeron que los musulmanes irían al infierno y que Jesús es el único camino hacia Dios. El abogado acusador argumentó que el hecho de Jesús «siendo la única vía hacia Dios» no puede ser cierto.
Christian Concern reporta que Michael Overd y Michael Stockwell fueron encontrados culpables, durante los cuatro días que duró el juicio, de usar «amenazas y palabras ofensivas o conducta impropia contra una persona para causar molestia, alarma, tensión o enojo, además, de el agravamiento por ofenda religiosa.»
Una tercera persona acusada junto a los predicadores, fue absuelta del caso.
Los predicadores insistieron que cada palabra que hablaron provenía de la verdad bíblica, pero el abogado querellante, Ian Jackson, argumentó que estas justificaciones y las creencias personales no podían ser consideradas como una verdades absolutas.
Los evangelistas callejeros fueron acusados de ofender a una comunidad en Bristol en Julio de 2016, por dichos como «Alá no existe» y «los musulmanes arderán en el infierno», según las declaraciones de un testigo.
Stockwell había citado las palabras de Jesús en la Biblia: «Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida», y también: «Si quieres llegar a través del Catolicismo, los Testigos de Jehová, los Mormones, o cualquier otra religión, la Biblia dice que eres un ladrón y un mentiroso, y el ladrón sólo vino para robar y destruir. Pero Cristo vino para dar vida.»
Reportes dicen que la muchedumbre reunida alrededor de los predicadores manifestó su descontento ante estas afirmaciones. La policía arribó al lugar y también acusó a Overd de sobrepasarse y haber «ofendido a las personas».
Los predicadores fueron puestos en custodia policial por varias horas, para después ser liberados bajo cargos de la Ley de Crímenes y Desórdenes de 1998 y el Acta de Orden Público de 1986.
Michael Phillips, que representó a los predicadores, llamó a los argumentos de la querella «un juicio moderno por herejía disfrazado de violación al orden público».
Overd, ya había sido acusado en 2014 por «causar ofensas», cuando públicamente denunció que el profeta islámico Mahoma se había casado con una niña de 9 años, y se argumentó que el predicador no debería cuestionar o criticar el Islam ni otras formas de vida.
«¿Dónde está nuestra libertad? Si no les gusta lo que digo, sólo vayanse y dejen que otros puedan oír el mensaje, pero solo desean acabar con la libertad de predicar,» dijo Overd.
Andrea Williams, jefe ejecutiva del Centro Legal Cristiano, condenó la decisión de la corte por sugerir que citar la Biblia es una forma de expresar odio.
«La Biblia y sus enseñanzas son los cimientos de nuestra sociedad y proveen muchas de las libertades y protecciones que disfrutamos hoy. Así que, resulta extraordinario que la querella, hablando en nombre del estado, pueda decir que la Biblia contiene palabras abusivas, las cuales, cuando son citadas en público, constituyen una ofensa criminal,» dijo William.