A las generaciones en el mundo cristiano en general:
Los jóvenes no necesitamos que la generación anterior «nos pase la antorcha.» Precisamos que enciendan las nuestras con su fuego para poder trabajar juntos hasta que nosotros podamos contagiarle el fuego a la generación que nos sigue. Sería egoísta esperar que una generación se apague para recién dar pie a la siguiente, cuando ambas pueden unir la experiencia y sabiduría con la energía y el entusiasmo para traer el avivamiento más grande de la historia. No buscamos personalidades ni lugares físicos o visibles; no queremos quedarnos adentro, buscamos naciones trasformadas por el Fuego y el Poder de la Presencia del Espíritu Santo..
«Generación a generación celebrará tus obras, y anunciará tus poderosos hechos.»(Salmos 145:4 RVr60)
Es tiempo de recuperar los púlpitos en la Política, el Arte, la Música, la Televisión, las Radios, Telecomunicaciones, Empresas y TODA VOCACIÓN. El avivamiento que viene será tan fuerte que no tendrá lugar a los que esperan herencias de los padres para empezar a trabajar, las herencias serán una especie de bonus tracks para los que comenzaron a trabajar a la par de sus padres.
«»Estoy por enviarles al profeta Elías antes que llegue el día del Señor, día grande y terrible. Él hará que los padres se reconcilien con sus hijos y los hijos con sus padres, y así no vendré a herir la tierra con destrucción total.»» (Malaquías 4:5-6 NVI)
Jesús dijo:
«Además les digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que está en el cielo.» (Mateo 18:19 NVI)
Entiendo que dentro del plan de Dios se encuentra el hecho de reconciliar generaciones y ponerlas de acuerdo para salvar a la mayor cantidad de almas de la historia por medio del poder del Espíritu Santo a través del acuerdo. Pero Jesús no terminó ahí, dijo algo más:
«Porque donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.»(v.20)
Ahora, qué tal si el acuerdo es entre tres generaciones, siendo las de los últimos tiempos con las siguientes características:
“En los últimos días —dice Dios—, derramaré mi Espíritu sobre toda la gente. Sus hijos e hijas profetizarán. Sus jóvenes tendrán visiones, y sus ancianos tendrán sueños.»(Hechos 2:17 NTV)
Dios nos quiere usar a nuestras familias completas ¿De acuerdo?
Mariano Javier Virnik