La falta de organización, produce pérdida de tiempo, dinero y disgusto entre los miembros del cuerpo de la iglesia, y después de tanto trabajo no sabremos si hemos alcanzado los objetivos planeados.
- Los Líderes , voluntarios o Personal Académico:
Debe contar con 6 áreas:
- El Director
- El coordinador general
- Secretario
- Tesorero
- Producción de materiales
- Los maestros y ayudantes
-Toda planificación debe tener por lo menos un año como corto plazo, pero lo correcto sería a tres años.
-Cada año los maestros deben ser evaluados y tienen que recibir entrenamiento de 48 horas, esto los motivará y creara un ambiente de comunión.
-Cada tres meses todo el equipo debe reunirse para evaluar y repasar objetivos.
- Las clases:
- Tienen que estar separadas por edades de crecimiento.
- Párvulos de 3 a 4 años.
- Principiantes de 5 a 6 años.
- Primarios de 7 a 9 años.
- Intermedios de 10 a 12 años.
- Adolescentes de 13 a 15 años.
- Jóvenes “A” de 15 a 18 años
- Jóvenes “B” de 19 a 24 años.
-Los maestros deben adaptar sus enseñanzas al grupo de su clase, puede ser flexible un años más.
-Cada 12 alumnos debe haber un ayudante.
- El presupuesto:
La estadística que hice personalmente durante diez años, cuando coordine el área en diferentes instituciones nacionales de niñez, donde pude entrevistar a muchísimos pastores y entregar encuestas, descubrí para mi sorpresa que es del 4 al 6 % anual.
La mayoría de los recursos lo hacen: Los maestros, los padres y padrinos del ministerio.
- El material de enseñanza bíblico:
También debe ser evaluado, y puesto bajo la lupa del Espíritu, si doctrinalmente es correcto y si afecta las cuatro áreas de crecimiento del niño.
- Físico
- Mental
- Social
- Espiritual
Dios te bendiga.