Marius, un rumano, y Ruth, un noruego, eran sospechosos de abuso de menores por los padres y el adoctrinamiento religioso después que una de las hijas le dijera a su profesora que les dé nalgadas a los niños como medida disciplinaria. Aquello alarmó a la docente quien denunció a las autoridades, ya que el castigo corporal es ilegal en Noruega.
Este hecho provocó que los cinco hijos de la familia fueran retirados de la custodia de sus padres a fines del año pasado por el servicio de bienestar infantil “Barnevernet” de Noruega. La razón, un “cristianismo y adoctrinamiento radical”, afirmaron. Los padres desconcertados optaron por reunir firmas para la devolución de sus hijos y mantener su confianza en Dios.
Hasta ahora el juez dictaminó devolver al más pequeño, al bebé de ocho meses, Ezequiel, mientras que los demás niños solo deben ser visitados dos días por semana durante dos horas. Las 60.000 firmas como petición de devolución de los niños dieron resultado. Miles mostraron su apoyo a esta familia cristiana de quienes violentaron sus derechos.
“¡Alabado sea el Señor!”, dijo su madre agradecida, aún faltan los otros niños y sin duda seguirán luchando por ellos. El caso ha expuesto otros claros ejemplos de Barnevernet que retira a los niños de sus padres por injusticia, por lo que este 16 de Abril, se realizará una protesta de protección infantil. Un llamado a la justicia y una manera creativa para aumentar la conciencia de todo el mundo a las injusticias que estas familias enfrentan actualmente.