La mayoría de las iglesias encuestadas por Ecclesiastical Insurance (Aseguradora Eclesiástica) usaron nuevos canales para mantenerse en contacto con sus congregaciones después del cierre total por COVID-19.
La vasta mayoría (93%) usó Zoom para llevar a cabo las reuniones virtuales después de marzo 2020, mientras que el 60% usó Facebook y un 5% YouTube. Solo un 1% usó Microsoft Teams.
Una significativa minoría (43%) de líderes religiosos reportaron un incremento en la asistencia, como resultado del uso de las plataformas virtuales.
Cerca de dos tercios (63%) planea continuar con la transmisión de los eventos, aún cuando las restricciones ya hayan sido levantadas por completo.
La encuesta sobre 1.000 líderes fue llevada a cabo en mayo, por Sociedad Bíblica y Ecclesiastical.
Michael Angell, director de operaciones de Ecclesiastical, dijo: «Las Iglesias son importantes para muchas personas y mantener ese sentido de comunidad y unión fue clave durante la pandemia.»
«Con las restricciones que no permitían encuentros físicos y muchos experimentando la soledad, ya sea en casa o aislados, éstas nuevas vías para mantener el contacto con la congregación se volvieron realmente populares.»
«Aunque las iglesias ya estan abiertas nuevamente, es alentador ver qué planean continuar con los canales virtuales y así mantener su audiencia, tanto la presencial como los virtuales, en la comunidad de fe.»
El reporte también reveló que el cambio al formato online requirió inversión financiera para muchos, con cerca de la mitad (56%) diciendo que adquirieron nueva tecnología para hacerlo posible.
De estos, el 55% dijo que había gastado cerca de £500 en equipamiento (cerca de U$700), también en dispositivos de sonido y cámaras. Cerca de do tercios (62%) compró equipamiento que les permitiera mejorar la calidad de la transmisión en línea.
Para el 69%, la inversión se dió gracias a ahorros que tenían, mientras que el 30% cuenta que debió juntar fondos a través de donaciones.
La encuesta sugirió que la transición virtual, significó un salto tecnológico para muchos líderes, dónde un 57% admitió que necesitó ayuda, y un 73% fueron ayudados directamente por miembros de la congregación.
La Iglesia Saint Edmund de Taverham, Norfolk, comenzó sus transmisiones en vivo después del cierre por la pandemia.
Para el rector y reverendo Paul Seabrook, el cambio ayudó a los líderes a mantenerse conectados.
«El aislamiento fue realmente desafiante para muchos y el no poder asistir a la iglesia afectó profundamente a nuestra comunidad», dijo.
«Queríamos estar seguros que podían continuar adorando a Dios y aprendiendo juntos, tal y como lo habíamos hecho hasta antes de la pandemia, y las transmisiones en vivo por Inter fueron una fantástica herramienta de ayuda.»
Además de los servicios en línea, la iglesia también usó Zoom para los estudios bíblicos y demás reuniones semanales. La plataforma Facebook fue usada para compartir oraciones y para la escuela bíblica para niños.
El giro hacia lo virtual ha sido un cambio positivo para la iglesia, que se encontró dando la bienvenida a sus miembros y a nuevos congregantes de una manera diferente.
Paul continuó: «En el pico de la pandemia teníamos cientos de visitas en nuestra página de Facebook,por día; diez veces más que lo habitual. Teníamos gente conectandose de todas partes del mundo.»
«Al usar los medios virtuales fuimos capaces de alcanzar a muchas más personas de las que nos visitaban presencialmente cada semana, así que definitivamente continuaremos por ese camino.»
La iglesia Saint Edmund planea continuar con los dos formatos de servicios, aunque las restricciones no están vigentes.
«Hemos visto la efectividad de los servicios en línea y seguiremos invirtiendo en más equipamiento para mejorar la calidad de la virtualidad- pero no perdemos de vista a quienes no pueden acceder a Internet», dijo Seabrook.
A pesar de los desafíos y cambios del último año, el Rev. Seabrook es optimista acerca del futuro.
Él agregó, «Somos iglesia para la comunidad en primer lugar y nuestro equipo pastoral no se detuvo en su servicio durante la pandemia.»
«Hemos visto personas en necesidad de alimentos y hemos alentado a la comunidad a involucrarse en este aspecto».
«Ciertamente hay más esperanza ahora y esperamos que el Señor nos guíe en este tiempo difícil hacia la libertad y a nuevos comienzos.»