El ser humano es un ser social, así lo diseñó Dios. Necesita estar en contacto con los demás, para su desarrollo sano y su bienestar personal, y espiritual.
¿A qué edad comienzan a integrarse los niños?
A las pocas semanas de su nacimiento, ya hacen caritas, sonríen, buscan miradas, necesitan llamar la atención, les gusta escuchar voces o música, interaccionan con las personas que tienen cerca, generalmente con los padres y hermanos.
A partir de los dos años empiezan a compartir juegos con otros niños.
Me dijo un padre:
“Los niños están molestando a mi hijo en la escuela”. “Mi hijo fue el único niño que no fue invitado a la fiesta de cumpleaños”.
Aquí te comparto algunos pasos que debemos dar como padres, para ayudar a nuestro hijo.
-Inscriba a su hijo en actividades que a ellos les agradan.
Todos los niños tienen una pasión y un don solo hay que descubrirlo.
-Hable directamente sobre los desafíos sociales.
Muestrele que no es el único niño que tiene este tipo de problema.
-Explique qué es la verdadera amistad
Es cuando nos sentimos bien con nosotros mismos en presencia de otra persona.
Promueva que se aleje de los chicos que no lo tratan bien.
-Empatice con sus sentimientos sin profundizar en lo negativo.
Cuéntele algunas experiencias en las que usted fue sujeto de burlas o excluido, y cómo manejó la situación. Es importante que él escuche que hay esperanza, que este tipo de situaciones son parte de crecimiento, pero que mejorarán.
-Facilitar que se relacione con sus compañeros fuera del contexto escolar
Invitar a otro niños a casa después del cole, hacer fiestas temáticas o reuniones los fines de semana, proponer a nuestro hijo hacer alguna excursión con sus amigos donde él elija.
-Fijarnos en su conducta social
A veces lo que ocurre es que nuestro hijo tiene alguna conducta que no favorece la interacción con los demás.
-Ser un buen modelo a imitar
Los niños aprenden muchas habilidades sociales a través de la observación de cómo se relacionan sus figuras de referencia con otros adultos.
-Evitar las presiones
Si nuestro hijo siente que le estamos presionando para que haga amigos, será totalmente contraproducente.
El camino de la socialización de nuestros hijos es largo y supone un aprendizaje.
“El hombre que tiene amigos, ha de mostrarse amigo; y amigo hay más unido que un hermano.”
Proverbios 18:24
Foto: freepik