La Iglesia Visión de Futuro cumple 44 años en octubre y vamos a celebrarlo justamente en la ciudad dónde nació Visión de Futuro. Se preguntará cuál ciudad fue. Bueno, Visión de Futuro nació en la ciudad de Paraná el 14 de octubre de 1972. Fue la primera noche de campaña que tuvimos allá en la capital entrerriana y a los 44 años volvemos a Paraná para una celebración muy especial.
La Iglesia Visión de Futuro últimamente ha estado viviendo algunos ataques y ha aparecido en los medios, hasta nos acusaron de ser una secta y de crear polémica por bendecir con vitaminas a los pobres. Nos han acusado aun yendo a nuestras oficinas para llevarse todos los elementos, como que estamos involucrados en un crimen.
Muchas veces uno recibe críticas. Hoy quiero hablarte al respecto de qué hacer cuando eres criticado. Y honestamente, que los medios critiquen a la iglesia no nos afecta. Creo que lo que más nos aqueja es cuando la gente del mismo seno de la iglesia empieza a hablar mal o coloca cosas en las redes sociales pues uno siente que con esta persona ha compartido y le ha abierto el corazón y al actuar de esa manera nos afecta más que lo pueda decir cualquier diario a nivel nacional.
¿Qué es lo que dice la Palabra de Dios que tenemos que hacer? Porque me imagino que a ti también te criticarán, dirán cosas en tu contra, algunas exageradas, otras mentiras, unas tal vez son verdad… Mas, ¿cuál debería ser nuestra actitud cuando hablan mal de nosotros, cuando nos critican? En la enseñanza de las bienaventuranzas, en el Sermón del Monte (en Mateo 5), Jesús dice: “Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. 11 Bienaventurados seréis cuando por mi causa (no por mi agenda, no por mi reino, ni imperio sino por la causa de la Cruz, por la causa del Reino de Dios) os insulten, os persigan y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.12 »Gozaos y alegraos, porque vuestra recompensa es grande en los cielos, pues así persiguieron a los profetas que vivieron antes de vosotros”. Dice con claridad que soy bienaventurado. Honestamente, uno no se siente así ni bien lee el artículo y escucha las críticas o los comentarios o lo que dicen por televisión. Pero la Palabra de Dios dice que somos bienaventurados y que hay que gozarse y alegrarse porque la recompensa es grande en los cielos.
“Porque así persiguieron a los profetas que vinieron antes que ustedes”. Yo era adolescente y en un periódico local donde vivíamos (en la ciudad de Santa Fe) sale un artículo acusando a la Iglesia Visión de Futuro de hacer misas negras (sacrificios de animales y demás) y también de vender droga. Habían hecho un allanamiento en la casa de una familia de la iglesia, encontraron nuestra literatura y alguien plantó droga en ese lugar. En los medios empezaron a decir que nosotros éramos los que se la habíamos vendido. Una familia fiel al Señor, consagrada, que nada tenía que ver con ese mundo. Estoy hablando de cuando yo era adolescente, 30 años atrás. Pero la acusación estaba.
Mi tía queriendo llamar a la iglesia se equivoca al discar y cuando ella pregunta: “¿Hablo con la Iglesia Visión de Futuro?”, la persona que atendió le respondió: “No, no llame ahí, son todos unos drogadictos, venden droga, hacen toda clase de cosas raras”, sin saber que le estaban hablando a la hermana del Rvdo. Omar Cabrera (p), que lo conocía perfectamente a su hermano y sabía cómo era. Pero las lenguas hablan, dicen cosas, los periódicos publican, ¿qué vamos a hacer? Yo junté a mis hermanos en el living de casa; papá y mamá no estaban, siempre viajaban, no estaban en esta oportunidad, y les dije: “Mañana vamos a tener que ir al colegio (con mi hermano cursábamos la secundaria y mis hermanas en la primaria) y algo va a pasar, pero la Biblia dice que somos bienaventurados y que tenemos que gozarnos y alegrarnos”. Oramos ahí y nos consagramos al Señor, y dijimos: “Señor, si es por Tu causa estamos dispuestos al insulto, al agravio, a que nos digan algo”. Yo dije: “Cuando tomen asistencia (me llamo igual que mi papá) y digan ‘Omar Cabrera’, alguien algo va a decir”. Y llegó el “Omar Cabrera” y nadie dijo nada y al salir al recreo nadie dijo nada, tampoco. Fui a la cantina del colegio y era como que el Señor al ver nuestros corazones y nuestra consagración había cegado los ojos de toda la sociedad. Nadie en nuestro entorno nos criticó por lo que los periódicos decían.
Vuelve a suceder, sigue habiendo ataques, pero entendemos que ‘mayor es Él que está con nosotros que el que está en el mundo’. Sabemos que Dios nos ha dado ‘la autoridad para poder condenar toda palabra levantada en contra de nosotros en juicio porque, esa es la herencia que Dios le da a sus siervos’ (Isaías 54:17). Sabemos que no hay arma forjada en contra de la iglesia que pueda prosperar.
Después que salieron estos artículos, la Iglesia ha entrado en un fervor en la oración, ha empezado a clamar más y a orar más. Mucha gente que hacía mucho que no venía a la Iglesia volvió para ver qué estaba pasando y, Dios usó eso para que se re-consagren y se dediquen a Él. Todas las cosas ayudan a bien a aquellos que conforme los propósitos de Dios hemos sido llamados (Romanos 8:28).
Pedro había sido criticado muchísimo y había sido puesto en la cárcel. Trataron de matarlo, de hecho lo tenían sentenciado, iba a morir al otro día. Pero la Iglesia, en vez de desconfiar (¿no será que es medio malhechor, no será que es medio ladrón, medio mentiroso que abusa de la credibilidad de la gente, que lo único que le interesa es la plata?, etc.); en vez de cuestionar, criticar o murmurar en contra de Pedro, la Iglesia se levantó a interceder. Espero que tú -como parte del cuerpo de Cristo- hagas lo mismo. Que puedas interceder y clamar por nosotros cuando nos acusan de ser una secta, cuando nos acusan de secuestrar gente o de llevarlas en contra de su voluntad. Que puedas levantar un clamor y una oración delante del Señor sabiendo que de Él viene nuestro socorro, de Él viene nuestra defensa y que Él siempre tiene la última palabra.
Pedro, acusado; la iglesia intercede por Él.
Cuando sale y es librado de una prueba eminente, él le escribe a la iglesia: “Mas también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. (No sé si cuando estaba en la cárcel él se sentía bienaventurado, rodeado por dieciséis soldados y encadenado). Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis,(no se inquieten) sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros; 16 teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, sean avergonzados los que calumnian vuestra buena conducta en Cristo” (1 Pedro 3:14-16). Y concluye en el versículo 17: “Porque mejor es que padezcáis haciendo el bien, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal”. Creo que suena bastante difícil el momento de la crítica, el momento de la persecución, el momento del ataque. Es bastante difícil decidir: hoy voy a santificar a Dios; es como que la carne quisiera tomar control y sacar ventaja, mas bien quiere buscar la revancha, la venganza. Pero la Palabra de Dios es muy clara: cuando nos critican, cuando murmuran de nosotros y cuando nos tratan de malhechores somos bienaventurados, y tenemos que gozarnos y alegrarnos, y santificar a Dios en nuestros corazones. Tenemos que mantener esa buena conducta en Cristo; sí, dar defensa, pero con mansedumbre, con reverencia para que la gente pueda, después de toda la situación, sentir el olor grato a Cristo que hay en cada uno de nosotros.
Pablo se pregunta (Romanos 8:33): “¿Quién acusará a los escogidos de Dios? (Si Dios está con nosotros) Dios es el que justifica”.
Hoy te desafío a que puedas vivir esa vida consagrada a Él, que puedas glorificar a Dios en las críticas y dar respuesta con mansedumbre a aquellos que te tratan mal. ¡Te bendigo en el Nombre de Jesús! Amén.