Una familia entera se convirtió al cristianismo después que un grupo de misioneros llegara a Mali a predicar del Evangelio de Cristo, ante la crisis económica y sufrimiento social.
La conversión llenó de alegría el hogar durante días, hasta que un grupo de islamistas irrumpieron la casa de la familia para amenazar al hogar y motivar a rechazar su fe.
«Empecé a enfrentar serios problemas cuando los islamistas se enteraron de mí y de la conversión de algunas personas. Me enviaron advertencias a través de amigos, diciéndome que dejara de hablar de Jesús o correría el riesgo de ser asesinado.”, revela Sory, padre de la familia amenazada.
Asimismo, dijeron que sabían que era fácil matar a los cristianos porque nosotros no tenemos armas. Simplemente pueden ser sacrificados. Estas amenazas han calado en los mas profundo de los corazones de la familia que se ven con temor hasta de salir a la calle, sin embargo, esto no mengua su amor por Dios.
Fuente: WorldWatchMonitor