Hoy viajaremos imaginariamente en el tiempo y espacio a la bella Jerusalén, tierra plagada de historias donde un grupo de hombres estaban a punto de ser testigos de un acontecimiento, el cual cambiaría para siempre sus vidas trayendo consecuencias eternas. ¿Te imaginas ser parte de un plan divino, donde el protagonista eres tú?
Era la tarde y su maestro les pide vayan a preparar la cena de pascua, en un lugar desconocido para ellos, pero que El mismo ya había señalado dentro de Sus planes, quizás sin comprender, pero obedientes, fueron en busca de ese aposento simplemente con algunos indicios que les fueron dados. Nos relatan las escrituras que al llegar allí JESÚS les dice: ¡Cuánto había deseado estar con ustedes!!
Como en aquella ocasión nuestro maestro y salvador está deseando pasar tiempo con nosotros, disfrutar de la cena e instruirnos en los futuros acontecimientos de nuestras vidas.
Volviendo a nuestra realidad, pienso cuán grande es el amor de DIOS en tener un maravilloso encuentro, ahora con toda su creación, si mi querido amigo, El mismo detuvo todas nuestras agitadas vidas, las escuelas fueron cerradas, cerró nuestros templos, detuvo fiestas, paralizó trabajos, gobiernos y cuanto más tan solo para volver a sentarse con Su creación a la mesa y compartir una pascua como nunca antes, donde nos hizo retornar a una búsqueda genuina de SU presencia, donde volvimos a encontrarnos con nuestros seres querido y aún mas, con nosotros mismos. Estamos viviendo un acontecimiento histórico, donde puertas afuera muchos no tienen esperanza, donde muchos no conocen a Su salvador, donde miles pasan a la eternidad sin salvación, por ello este proceso por el cual estamos transitando nos desafía para estar preparados a lo por venir, para caminar tomando Su cruz y negándonos a nosotros mismos, dispuestos a entregar nuestras vidas, en sacrificio, día a día, palmo a palmo, darlo todo de nosotros, reflejando Su gran y maravilloso amor eterno por el hombre a través de tu vida y a través de la mía.
Estamos frente a una gran oportunidad, de participar en una nueva Cena Del Señor donde hoy más que nunca podamos entender mi querido lector, somos parte de un plan divino, diseñado por El mismísimo DIOS, para darle salvación y vida eterna a Su creación.
Fabian Casas
Secretario General de la Fraternidad de Consejos Pastorales de la República Argentina, Pastor Principal de la Iglesia Evangelica Determinados en la Ciudad de Garin.
