¿Por qué es que, de los 4 millones de musulmanes que viven en Alemania, los iraníes son los más propensos a convertirse al cristianismo? Los ministros entrevistados atribuyen este hecho, en parte a su alto nivel de educación. Ellos dicen que la mayoría de los refugiados iraníes son empresarios, médicos, científicos, ingenieros, abogados, economistas, maestros y otros profesionales o estudiantes. Al llegar a Alemania siguen un patrón persa de siglos de antigüedad cultivado en un país donde las organizaciones profesionales germano-persas han existido desde el siglo diecinueve.
“Irán está sufriendo de una gran fuga de cerebros como resultado de sus políticas fanáticas religiosas”, observa Schirrmacher. Hans Jurgen Kutzner, quien ministra a 1.000 persas en nombre de las Iglesias Luteranas Evangélicas Unidas en Alemania relacionadas con el estado, coincide que: “en lo que se refiere a la elite con educación universitaria en Irán, el islam ha perdido toda la integridad moral, especialmente entre los jóvenes”.
Citando un informe de la red nacional de radio alemana, Martens escribió a su parroquia que talvez la mitad de los jóvenes residentes urbanos persas y educados simpatizan con el cristianismo en estos días, mientras que Klingberg de la ISHR advierte que tales cálculos podrían ser exagerados.
Aun así, Bachman atribuye el surgimiento del cristianismo clandestino en Irán en parte al hecho de que cada día 17 millones de sus 79 millones de personas escuchan programas a través de la radio por satélite o televisión cristiana del extranjero. Hablando desde el anonimato, un pastor luterano de Estados Unidos que participa en la obra misionera clandestina en esa nación teocrática habla con temor de la intensidad de los intercambios entre las comunidades cristianas en expansión en el exilio y en la misma Persia.
¿Por qué lo hacen?
Un clérigo entrevistado para esta historia rechazo la sospecha que manejan algunos funcionarios del gobierno alemán que muchos refugiados de Irán se convierte únicamente debido a la condición de refugiado. Ellos señalan que muchos conversos tuvieron que cambiar de la pobreza al confort material. “usted no hace eso solo por razones materiales”, dice Gotz. “Ni tampoco estudia muy duro por su bautismo y asiste a sus servicios tan fielmente”.
Martens admite que se enfada al testificar ante tribunales de inmigración a nombre de los inmigrantes de Persia. “Puede usted imaginar? Gruñe. “Aquí tenemos jueces cuyo conocimiento del cristianismo es, en el mejor de los casos, un nivel superficial del protestantismo cultural, y ellos presumen de juzgar con sinceridad la fe cristiana de otra persona”. Al igual que su colega, Bachman dice: “ Yo pongo siempre en claro a los ex musulmanes que me solicitan instruirlos en la fe cristiana que el bautismo no los salva automáticamente de ser devueltos a Irán por las autoridades alemanas”.
Tal vez el argumento más convincente en el que se apoya el obispo Schone acerca de la imagen de un Dios riéndose en el trabajo se encuentra en la génesis de un avivamiento persa en Santa María. Este comenzó en Sajonia, el lugar del nacimiento de la Reforma, donde los cristianos se han convertido en una especie en peligro de extinción.
Hace 12 años, la parroquia Trinidad en Leipzig, una pequeña congregación de la iglesia luterana independiente, comenzó la enseñanza del alemán como segunda lengua a los solicitantes de asilo mientras esperaban la aprobación del gobierno a su estado de refugiado.
La iglesia Trinidad usa la traducción de la biblia de Lutero como libro de texto. Los lingüistas importantes dicen que dicha traducción debe haberse editado en lengua alemana moderna. Pero, aun así, intrigados por lo que leen muchos exiliados solicitan ser bautizados. Con el correr del tiempo ellos han traído más amigos que también desean aprender los fundamentos de la fe cristiana. “Hoy en día, un tercio de nuestros 150 miembros son persas”, dice Markus Fischer, pastor de la iglesia Trinidad.