La libertad religiosa es completamente inexistente en el opresivo régimen de Corea del Norte a cargo de Kim Jong Un; así lo reportó el Comité de Asuntos Extranjeros de Estados Unidos, denunciando que más de 100,000 personas son obligadas a trabajar en los Campos de concentración y trabajos forzados.

«Sabemos que para el ciudadano común de Corea del Norte no existe el derecho a la libertad religiosa, a congregarse, ni siquiera a reclamar nada al gobierno. Pero lo que es aún mas horrendo, es lo que le sucede a los 120,000 que han sido arrestados y llevados a los campos de trabajo, algunos han estado allí por mas de tres generaciones,… los trabajos forzados, la manera en que son golpeados aún solo por sonreír» dijo Ed Royce, del Comité, ilustrando su ardua labor de investigación junto a la Coalición de Iglesias Coreanas por la Libertad de Corea del Norte.

Royce sugirió que las duras sanciones al gobierno de Kim han surtido algún efecto. Al menos hasta ahora, han sido exitosos los esfuerzos por dar a conocer a los coreanos la realidad que vive su propio país.

«Mientras continuamos en esta lucha, voy a concluir diciéndoles que, han hecho el más responsable de los actos, al levantar su voz en favor de los que no pueden hacerlo. Gracias por todo lo que hacen para proteger la libertad religiosa», agregó.

David Curry, CEO de Open Doors, le dijo al The Christian Post en enero: «Cerca de 70,000 cristianos han sido encarcelados este año por causa de su fe. Ha habido ejecuciones -aunque no podemos dar una cantidad exacta, sabemos de muchas. No hay descanso para la persecución en Corea del Norte».

«Obtener información es lo más difícil. No sabemos la cantidad exacta de cristianos martirizados, aún así Corea del Norte lidera las listas de perseguidores mundiales. Esto se debe a que el gobierno utiliza todo su poderío para suprimir la fe cristiana, castigando aún el derecho más básico de poseer una Biblia»,agregó Curry.

Corea del Norte es la nación más opresora para los cristianos, donde cualquier forma de religión está estrictamente prohibida. Ha liderado las cimas de las listas mundiales de perseguidores por 14 años consecutivos. Y aún se mantiene como un gigante anticristianismo que no ha podido ser destronado ni siquiera por el avanze en los últimos años del terrible Estado Islámico.