El 10 de Agosto, más de un millar de musulmanes llevaron a cabo una manifestación en Indonesia, instando a las autoridades locales revocar un permiso de construcción que accedió a una iglesia cristiana.
La ubicación de esta iglesia sería en una zona fuertemente musulmana, lo cual hizo que los pobladores manifestaran sosteniendo que los líderes de la Iglesia obtuvieron el permiso de construcción con medios inapropiados.
«Creemos que el alcalde va a revocar la licencia de esas obras, ya que no es válido», dijo un líder musulmán. Sin embargo, las autoridades locales otorgaron el permiso de construcción en julio. Desde entonces las iglesias en Indonesia han luchado con una legislación muy restrictiva que hace que sea difícil obtener los permisos correspondientes.
La iglesia cuenta con 9.400 miembros, y debido a su crecimiento decidieron comprar un terreno más grande desde el 2000, lo cual hasta la fecha ha sido imposible su construcción. Además están obligados a proporcionar una lista de nombres y firmas de 90 fieles y obtener apoyo firmado por al menos 60 residentes locales, junto con la aprobación de un jefe de aldea.