El pastor de una mega iglesia menos esperado a nivel mundial es un analfabeto, sin calzado y padre de cinco hijos.

Bhagwana Lal cultiva maíz y cría cabras en una colina en Rajasthan. Él pertenece a los tribales: el grupo cultural Dalits, cuyos miembros están fuera del sistema de castas indio.

Cada domingo, su iglesia de un ambiente, con ventanas de un alegre color azul y ventiladores de techo tan bajos que casi rozan las cabezas, contiene a 2,000 personas. La congregación indígena reúne a granjeros locales, cuyas familias asisten a los servicios en turnos para no descuidar los animales. Las rajaduras y uniones en las paredes blancas son símbolo de orgullo, pues son las marcas de las tres veces en que la iglesia tuvo que ser agrandada.

Cientos de coloridos banderines adornan el metal corrugado en el cielo razo. Cuando se le pregunta a Lal acerca de los banderines, responde: :’Los pusimos por diversión’ mietras ríe alegremente. La decoración es usada normalmente en ceremonias de boda. «La misma sensación de alegría debería sentirse dentro de la iglesia. La gente debe sentir que ésta es la casa de Dios.»

En contraste, se puede visitar otra megaiglesia al sur de India. Un taxi se interna en el denso tráfico: autobuses, motocicletas, bicitaxis, todo rodeados de personas a pie.

Además del caos, un detalle resalta a la vista: muchas personas tienen Biblias en sus manos.

Un cartel cerca de la parada de autobús muestra el porqué: «Bienvenidos a la Iglesia mas grande de India.» La multitud llega al Templo Calvario -es el servicio de las 6.00 a.m. nada menos. La iglesia tiene espacio para 35,000 personas y llena cada uno de sus cinco servicios los domingos. La escuela dominical enseña a 7,000 niños.

El pastor fundador Satish Kumar acaba de regresar de una conferencia en la Iglesia Purpose-Driven de Rick Warren, donde compartió la Palabra con la congregación.

«Muchos americanos piensan que nada está ocurriendo entre los cristianos en India,» compartió Kumar. «Tenemos que cambiar esa mentalidad.»

Las estimaciones hablan de un crecimiento en el crecimiento del cristianismo en India, de 25 a 60 millones de personas, en su mayoría católicos. Esto es una pequeña minoría en comparación con el número de 1 billón de hindúes. Aun así, la cifra sirve para posicionar a India entre los 25 países con mayor presencia cristiana, inclusive por encima de países ‘cristianos’ como Uganda y Grecia.

Existe hoy un innovador esfuerzo misionero y evangelizador en el país, a pesar de la creciente persecución de las nacionalistas hindúes. De hecho, lideres evangélicos a lo largo de todo el

territorio coinciden en que, el mayor desafío no son las restricciones en la libertad religiosa, sino el capacitar suficientes pastores para que discipulen a los nuevos creyentes.

Se cree que el futuro para la iglesia en India es nada menos que un avivamiento y un crecimiento continuo.