Una iglesia bautista del sur de una de las comunidades mas pobres en los Estados Unidos planea construir 20 hogares pequeños para adictos en recuperación y así ayudar en sus necesidades en el camino a la sobriedad.
La Iglesia Bautista Crossroads Community en el Condado de McCreary, Kentucky, y su pastor, Grant Hasta, están construyendo una comunidad de pequeñas casas para una zona que ha sido golpeada por una epidemia de adicciones a los opioides en los Estados Unidos.
WBIR news reportó que el proyecto llega en un momento en donde el 32% de la población de McCreary vive bajo la línea de pobreza.
«Cuando alguien quiere ayudar pero no cuenta con el apoyo detrás de un sistema que lo haga sustentable… es cuando la situación se da en retroceso,» dijo Hasty.El Pastor explicó que la Iglesia posee cerca de 13 acres de tierra en una granja de caballos, y que la mitad será usada para la construcción de pequeños hogares. Además de ayudar a los adictos a mantenerse sobrios, el programa busca incorporar entrenamientos laborales para que puedan sostenerse financieramente.
La voluntaria del programa, Vicky Kidd, le dijo a WBIR news que aquellos que luchan contra alguna adicción necesitan un lugar donde puedan ‘comenzar de nuevo’.
«Ellos están aquí desesperanzados,» dijo Vicky, agregando que los hogares ofrecerán un «nuevo comienzo».
La iniciativa ha ganado la atención de programas misioneros de todo el país. WBIR news reportó que un grupo misionero en Georgia planea construir dos hogares más para los adictos en recuperación. Además, grupos de iglesias de Florida y Texas planean viajar en las siguientes semanas y unirse al proyecto para ayudar.
«Creo que esto traerá esperanza,» dijo Kidd.
Hasty dijo que después de finalizadas las construcciones se decidirá quiénes habitarán las casas.
Debido a que la crisis de los opioides ha golpeado a la región Apalache de una manera especialmente dura, la Convención Bautista de Kentucky llevará adelante conferencias de entrenamiento en Agosto, llamadas ‘Rompiendo el Silencio’. Esto apunta a enseñar a líderes de iglesias y familias a lidiar con la crisis que, tal vez, esté afectando a algún miembro de la congregación o de la familia.
Los asistentes a la conferencia recibirán entrenamiento acerca de cómo funciona el cerebro de un adicto para entenderlos mejor, aprenderán como llegar a ellos con compasión y gracia, y a encontrar asistencia práctica y ayuda legal para sus situaciones.
«Las consecuencias de la crisis de Opioides alcanza al interior de cada comunidad, afectando a cada familia y a cada iglesia,» cita la página web de la conferencia. «Todos conocemos a alguien que ha sufrido bajo esta tragedia y conocerlo nos demanda una respuesta al respecto. No podemos quedarnos en silencio. La crisis de los opioides es una epidemia que demanda un mayor compromiso e involucramiento de parte de la iglesia.»
La Iglesia Bautista Crossroads Community es tan solo una de tantas iglesias alrededor de Estados Unidos que están llevando adelante proyectos para asistir a las problemáticas de sus comunidades -ya sea con programas de rehabilitación o de otro tipo.
En Los Ángeles, la Fraternidad Cristiana Nanoom es una iglesia coreana-americana de la ciudad que ofrece refugio, comida y consejería, asistiendo a los drogadictos en su camino a la recuperación.
El programa está abierto a todos sin distinción de etnias, y puede servir simultáneamente a 50 personas a las vez. El programa es tan popular, que ya tiene a 300 en su lista de espera.
En abril, una megaiglesia de Texas anunció que ayudaría con el pago de U$ 10 millones en cuentas médicas para 4,000 familias a través de un programa de salud llamado RIP Medical Debt.
En una comunidad pobre de Hampton, Virginia, la Iglesia Vineyard está al frente de una tienda sin fines de lucro que le permite a los residentes comprar artículos de primera necesidad a un precio más bajo que en una tienda común.