El ser humano tiene en su interior una determinación constante de ser libre e independiente, de elegir en forma personal su destino y sus gusto. Así es como Dios lo creó con libre albedrio frente a la vida y su destino.

Muchas decisiones personales o realidades adversas dan como resultado opresión o falta de libertad, terminando a que somos nosotros mismos los responsables de esta falta de independencia, luego de haber perdido tal libertad.

Jesucristo lo presentó muy claro al decir: Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres… Ya mucho han entendido esta palabra Bíblica, que permitió lograr en aquellos que la adoptaron en sus corazones la única salida para tener una libertad espiritual asegurada.

Si esa libertad llegó ya a nuestros corazones, es nuestro compromiso de llevar ese mensaje a los que todavía siguen oprimidos por los vicios, la desesperanza, angustia y el pecado. Hagamos posible que la libertad llegue a mas seres humanos.

Hacer tesoros en los cielos es justamente eso, llenar de eternidad en quienes perdidos y sin libertad tienen un futuro de muerte, logremos llevarles la verdad que les brinde la independencia del pecado y su resultado de alejamiento del poder salvador de Dios.