Randy Wagner, un hombre de Texas, Estados Unidos, evitó que su casa se inundara tras una idea que, según él dice, Dios le dio. Su vivienda está ubicada en Rosharon, uno de los lugares golpeados por las históricas inundaciones en Texas. Cuando todos se preparaban para enfrentar las fuertes lluvias, Randy afirma que Dios guió su mano para comprar por internet una presa de agua.

Sus vecinos, en cuanto vieron la presa de 400 pies y 30 pulgadas de alto que le costó a Randy $8,300, se rieron, considerándolo loco. “Yo era como el hombre loco, todo el mundo se reía de mí”, dijo.

Wagner, que tenía fe en Dios, puso a funcionar la presa y, mientras sus vecinos evacuaban por las fuertes lluvias, él y su familia permanecieron tranquilos y a la espera de que todo pasara rápido.

El agua subió 27 pulgadas, rodeando por completo su vivienda, pero nunca se filtró a través de las barreras. Sólo su casa se salvó de ser inundada.