Los niños sin obligación empezaban su día escolar recitando la frase que fue motivada por dos maestros de kindergarten debido a las consecuencias de los ataques terroristas musulmanes el 11 de septiembre de 2001,era una manera de honrar a aquellos que perdieron sus vidas en ese día terrible.
El director de la escuela envió una carta a los padres informándoles que la Administración había decidido suspender la frase al final del juramento a la bandera.
“‘Dios bendiga a Estados Unidos’ no tiene nada que ver con la religión pues no fue enseñado con la intención de tener cualquier tipo de connotaciones religiosas, fue enseñado para mostrar patriotismo sobre todo porque hay tanta gente que cada día arriesgan sus vidas para protegernos y mantenernos a salvo.» dijo el director Sam Sassano.
Sin embargo por temor a una demanda costosa se tomó la decisión final de aceptar el mandato.