Entrevistamos al Pastor Menonita Rafael Stabile de Río Negro quien nos comparte una síntesis de lo ocurrido en Choele Choel.
El Pastor Rafael Stabile nos cuenta como comenzó todo: En los primeros días del mes de marzo pasado supuestamente con la llegada de algunas personas del extranjero, España e Italia, y que no se reportaron como debían hacerlo. De modo que los infectados se multiplicaron rápidamente.
Choele Choel se encuentra en 5° lugar de los distritos damnificados de la Argentina, según el informe oficial del gobierno de la provincia de Río Negro. Y el informe oficial del gobierno los datos de la provincia al 11 de Mayo son: 290 infectados, 61 recuperados y 11 muertos, de los cuales 5 son de Choele Choel.
Como ocurrieron los hechos
En el día de ayer, sepultamos luego de una sencilla ceremonia de 15 minutos en el cementerio, sin velorio, a la que fuera la esposa de uno de los 6 pastores de la congregación, Griselda Fernández de CARIMAN, de 66 años. Rubén Carimán y Griselda tuvieron 4 hijos, que son fieles creyentes: Marcos, el mayor vive con ellos; Pablo, su esposa y tres hijos residen aquí; Emanuel y Gemima viven en La Plata, así que sólo Pablo, Viviana y el hijo mayor fueron los únicos que pudieron acompañarlos en la despedida de la madre y abuela tan querida.
El esposo Rubén y el hijo Marcos todavía están internados en el hospital local, los únicos en este momento gracias al Señor, y hay en dos lugares de aislamiento otras 15 personas que son sospechados de Coronavirus.
Como todos saben esta pandemia trajo, entre todas las consecuencias, el cierre de los templos, de modo que se suspendieron hasta la fecha los cultos públicos. Pero Dios que es el Señor del cielo y la tierra salio victorioso, porque cambió la maldición en bendición como lo hizo tantas veces en el pasado Deut. 23:5 y Neh. 13: 1-2. Los templos se cerraron, pero el Señor abrió las casas como al principio.
Estrategia divina
Hace ya unos cuantos años Dios nos mostró que la iglesia en esta ciudad se reuniera en seis barrios. Así que los pastores decidimos dividirnos en barrios, para multiplicarnos y trabajar con las familias vecinas. Para desarrollar el potencial de los dones que el Espíritu Santo repartió, y así también multiplicar los diferentes ministerios.
Dos veces al mes todos los barrios se reúnen en un solo templo para celebrar al Señor y gozarnos en ser una sola iglesia (6 barrios, pero seguimos siendo un solo cuerpo)
De modo que ahora cada casa se convirtió en un altar en el cual las flias. alaban, adoran y sirven al Señor testificando y edificándose en la fe mutuamente. Así va creciendo la mutualidad y los vecinos ven una iglesia más viva y no siendo templistas y religiosos litúrgicos….Animo, pues el Señor viene pronto