ANTALYA, Turquía —Si no has prestado atención en las clases de historia, tal vez, no puedas conectar a Turquía con el Cristianismo. Un viaje reciente a esta república secular, donde el 99% de la población es musulmana, ha revelado una impresionante colección de sitios donde la Iglesia Primitiva que puede insertarte en la historia de la iglesia y darte una conexión más profunda con el Evangelio.
Turquía, oficialmente reconocida como República de Turquía, es mencionado muchas veces en la Biblia, partucularm en el libro de los Hechos, donde es llamada Asia Menor, lugar donde floreció el Cristianismo. Es el lugar de nacimiento del Apóstol Pablo, quien nació en Tarso. Él es considerado por muchos expertos como la segunda figura más importante después de Jesús, ya que la mitad de los 27 libros del Nuevo Testamento se le atribuyen cómo autor.
Gracias al Ministerio de Cultura y Turismo de Turquía, se realizó un viaje con representantes del GoTürkiye, el guía oficial del país, para dar una mirada de primera mano a la historia cristiana y cultura turca en el viejo mundo; la experiencia apuntaba a agregar a Turquía cómo un lugar que debe ser visitado por cristianos.
Por seis días, comenzando el 1 de diciembre, un viaje por las Siete Iglesias del Apocalipsis en Turquía destacó las ruinas de los templos de Asia, descritos por San Juan, el “discipulo amado de Jesús”, en el libro de Apocalipsis. Estás iglesias, que recibieron cartas de Jesús, son bien conocidas entre los creyentes, por estar localizadas en las ciudades de Efesos, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia, y Laodicea.
“Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Efeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea”, dijo San Juan en Apocalipsis 1:10-11.
En Efesos, por ejemplo, donde los primeros cristianos enfrentaron significativa persecución, la narrativa de cómo ellos sobrevivieron en una ciudad donde la religión dominante era la adoración a la diosa Artemis, también conocida como Diana, era muy palpable cuando se recorría el templo.
Comparando las humildes ruinas de la pequeña iglesia con el templo opulento y pagano en Sardis, que también funcionaba como templo judío, la construcción de templos con hermosos mosaicos en Laodicea, mostraron que tanto de la cultura de cada ciudad impactó en la expresión de fe local.
Gran parte de la experiencia de recorrer estos antiguos sitios, para los cristianos viene simplemente de estar presente en la tierra y entender que tan lejos su fe viajó y los desafíos que sufrieron para mantenerse.
También es una experiencia surrealista el explorar la historia del Adhan, el llamado público a la oración, que inunda varias veces el aire durante el día.
Con eventos como la explosión de la bomba en Noviembre en Estambul, que dejó seis personas muertas y 81 heridos, o las tensiones después de la conversión de la famosa Hagia Sofía en mezquita otra vez en 2020, muchos cristianos se preguntan si es seguro Turquía. ¿Y si serán bienvenidos?
Para aquellos que se preguntan de la importancia de la Hagia Sofía, el edificio de seis siglos, que la UNESCO lo considera Patrimonio Mundial, es recordada como el “mejor ejemplo de la arquitectura bizantina cristiana en el mundo”, según Naciones Unidas. Era una iglesia de más de 900 años hasta que se convirtió en una mezquita después que los Otomanos conquistaron Estambul en 1453. Fue transformado en un museo en 1934, tanto para generar ingresos y por razones políticas.
En julio de 2020, las autoridades turcas transformaron el lugar en mezquita otra vez, desafiando a la UNESCO y a otros miembros de la comunidad internacional.
Ugur explicó, sin embargo, que Turquía es segura para los visitantes y comparó las noticias de bombardeos en el país con los tiroteos en las escuelas de Estados Unidos -eventos no frecuentes y trágicos que quieren dominar los titulares y cambiar la reputación del país.
Los cristianos y personas de otras creencias, dice Ugur, son bienvenidas en Turquía, que tiene 3000 iglesias funcionando y 700 sinagogas. Y esa es la razón de los esfuerzos para excavar las ruinas y hacer al país accesible para el mundo.
“En Turquía, no hay opresión para el otro, en cuanto a religión. Es como el color de un hermoso mosaico. En Estambul, puedo mostrarles lugares que tienen una iglesia, una sinagoga y una mezquita en la misma cuadra, una al lado de la otra”, dijo. “Hay dos lugares como este. Una iglesia, una sinagoga y una mezquita, unidad pared a pared”.