El viaje de Sanjay, un médico musulmán, hacia la fe comenzó cuando estaba internado en el hospital de Calcuta, en India, para su tratamiento de quimioterapia. De esos momentos, Sanjay recuerda: «Yo estaba llorando, y el nombre de Jesús que yo no quería creer volvía a mí una y otra vez. Yo estaba muy débil y enfermo. Entonces oré a Jesús y le dije: ¿Me podrías sanar? “Entonces, fui sanado” -enfatiza y muy emocionado afirma-: “Vi que sólo Jesús podía salvar mi vida”.

Este milagro de sanidad en la vida de Sanjay lo motivó a que rindiera su vida a los pies de Cristo y se bautizara. Ahora, este médico vive en Bengala Occidental, un lugar con escasos cristianos. Entonces utilizó su historia de milagro para predicar el Evangelio en su pueblo. Su familia lo echó de la casa y le dijo: “No queremos tener nada que ver contigo”. Ante esta situación, Sanjay tuvo miedo y rogó a Dios por su protección. Dios actuó y como respuesta su madre se compadeció de él y lo dejó regresar a la casa.

Durante años, el doctor cristiano fue perseguido por varios vecinos de su comunidad molestos con él por su prédica del Evangelio. Pero esto no lo detuvo ni lo detendrá. Además de trabajar como médico, Sanjay se ha dedicado a servir como evangelista apoyado en su ministerio por UK Charity BMS World Mission.

Para finalizar la historia, el propio Sanjay relató: «La gente que me persiguió durante muchos años se cansó. Y al mismo tiempo, decían de mí: “Cuanto más le decíamos que no hablara, más salía y predicaba”.

Esta perseverancia y compromiso con Cristo por parte de Sanjay ha producido a lo largo del tiempo que, como él mismo relató, “la gente que en otro tiempo quería echarme ahora me traen sus pacientes para que yo los atienda”.