Un grupo de musulmanes protagonizaron un disturbio a principios de septiembre, en la aldea de Tawa en Minya, Egipto; donde hirieron a tres cristianos y destruyeron sus casas y carros, llenos de ira y en respuesta a una publicación en Facebook donde se hacía una plegaria a Jesucristo para que tocara los corazones de los terroristas.
Christian Concern, grupo de ayuda contra la Persecución, reportó el lunes que el ataque tuvo lugar el 14 de septiembre, cuando un grupo de musulmanes se reunieron en la aldea frente a los hogares y comercios de cristianos.
«Estaban arrojando piedras a las casas al grito de ‘Alá es grande’. También atacaron con palos y piedras a la Iglesia Ortodoxa Copta Mar Girgis a pesar de que contaba con presencia de guardias de seguridad, pero los guardias no pudieron confrontarlos ya que atacaron en gran número,» explicó Essam, un testigo cristiano del pueblo.
«La policía luego arribó a la aldea, controló la situación y arrestó a los musulmanes. Las fuerzas de seguridad se han desplazado por toda la aldea para preservar la calma.»
El enojo aparentemente se desató después de una publicación en Facebook, hecha por un cristiano de 22 años, residente de Tawa, llamado Bassem, quien escribió en contra del Estado Islámico y los ataques terroristas en Minya, donde 29 cristianos fueron masacrados.
«¿Nosotros (los coptos) no pertenecemos a Egipto? No importa cuánto traten de hacernos daño, un día todos sus esfuerzos fracasarán. ¿Creen que estoy llorando? ¡Jamás! No lloro porque confío muchísimo en Jesús, me postro ante Él y Él me ama. No me abandona ni por un momento,» decía la publicación.
«Cuando destruyen los hogares de Sus Hijos, lo están atacando a Él mismo. Le pido a Jesús que toque sus corazones y los cambie. Nuestro Señor sabe y ve lo que nos está pasando. Sigan y crezcan si quieren en su terrorismo pero no tengo miedo porque es algo de grave caer en manos de Dios.»
Bassem aparentemente compartió fotos de Salafi Sheikhs, quien se cree participó en los ataques contra los coptos. Aunque borró la publicación días después, ya se había propagado por las redes sociales y enfureció a los musulmanes, quienes lo consideraron un insulto en contra de su religión.
19 musulmanes fueron detenidos el 15 de septiembre luego de los actos de violencia, aunque también se solicitó el arresto de Bassem y de Mena, otro cristiano acusado de insultar los símbolos musulmanes. Se supo que ambos cristianos abandonaron la aldea.
Los ataques de mayo contra los coptos que viajaban en autobús a un monasterio, alcanzaron condena internacional, cuando los sobrevivientes contaron que fueron obligados a renunciar a su fe.
Mariam Adel, una joven madre cuyo esposo y nueve de sus parientes murieron en el ataque, contó que los extremistas ordenaron a las mujeres que bajaran del autobús y les obligaron a convertirse al Islam.
«¿Renunciar a nuestra fe? Por supuesto que no,» contó Adel acerca de las reacciones de las mujeres. «Si queríamos, podíamos lograr que nos dejen volver al autobús y que nos trataran bien. Pero solo queríamos a Jesús y confiamos que Él no nos abandonaría.»
Aparte de estas situaciones, se reportó en Agosto que los cristianos también han enfrentado oposición del gobierno. Cerca de 1,300 miembros de Iglesias quedaron sin servicios religiosos en Minya después de que musulmanes se quejaran en contra.
El Obispo Copto de Minya, Anba Makarios dijo respecto a esto último: «El aparato de seguridad del gobierno ha privado a los Coptos de practicar su fe en Kedwan, Minya, alegando que debido a la oposición de algunas facciones, era necesario reconsiderar algunos aspectos para evitar herir sensibilidades.»
«Sin embargo, a nadie le importa no herir sensibilidades entre los Coptos, manejandose como si las decisiones pertenecieran a las ‘facciones ofendidas’ y no al Estado Egipcio, y a las leyes que lo rigen.»
