En la ciudad de Slavonski Brod, Croacia, se ha instalado un imponente campo de refugiados sirios. Hasta allí ha llegado un trailer lleno de ropa de abrigo y zapatos enviado desde el Ministerio de Obra Social de la Comunidad Bautista de Madrid.
Desde España, la obra social de diversas iglesias evangélicas bautistas se ha estado movilizando para enviar ayuda a los refugiados que siguen llegando a Europa de a miles.
Un equipo formado por los pastores Pedro Gil (Getafe), Fernando Méndez (Emanuel); la directora de Obra Social, Elisabet Suarez; el misionero de IMB, David Sparks y el cámara Ramón Olmo viajaron para conocer la situación y poder entregar la ayuda en forma personal.
Las imágenes, por cierto son impactantes. Los miles de refugiados necesitan ayuda y contención. Al respecto, los pastores y misioneros relataron que: “Cada día llegan al campo entre tres y cuatro trenes llenos de refugiados sirios que hay que atender. Allí trabajan incansablemente los representantes de la decena de organizaciones que cooperan dentro del campo, hasta que el mismo tren lleva a los refugiados a Eslovenia, y de allí al país de residencia”.
La labor de la misión ha consistido en clasificar la ropa y entregarla a los refugiados, explican los miembros del equipo de ayuda, y enfatizan: “Los refugiados sirios llegan sin nada, y se van con una sonrisa de agradecimiento”. En otro párrafo del comunicado enviado a los Medios de Difusión, explicaron que: “Por eso, nosotros miramos al cielo y señalamos al Señor quién es quién se merece todo nuestro reconocimiento, porque su amor no mira color de piel, ni creencia…”; “Damos gracias a Dios por permitirnos estar sirviendo varios días en este lugar. A Él sea la Gloria”.
La Iglesia de Cerdanyola recoge zapatos
Del mismo modo las iglesias de Cerdanyola como las de Barcelona han estado colaborando en la recolección de zapatos. Con respecto a esto, Daniel Banyuls, pastor de la Iglesia Bautista en Cerdanyola explicó: “Si Dios quiere salimos hacia Croacia con un segundo cargamento de ayuda para los refugiados que cruzan los Balcanes: 2000 pares de zapatos para hombres, pieza clave y urgente para afrontar el invierno en medio de este moderno éxodo”.
Por último, Banyuls relató entusiasmado: “Vecinos y ciudadanos de Cerdanyola junto a otras iglesias de toda el área metropolitana y también de toda la ciudad de Barcelona nos han provisto de calzados.
También organismos no evangélicos de otras ciudades han colaborado. Este domingo 21 salimos hacia el campo de refugiados de Slavonski Brod, el más grande de Croacia”.
Banyuls también contó que hacia donde se dirigen ya estuvieron en diciembre pasado donde entregaron una donación de doce toneladas de ropa.