Algunos cristianos de Europa ven la llegada de refugiados de Oriente Medio, la migración más grande desde la Segunda Guerra Mundial, como una oportunidad en el medio de la crisis. Ellos dicen que ya no necesitan enviar misioneros a países islámicos, pues los musulmanes vienen hacia ellos. Esta ola expone a muchos inmigrantes a un mensaje nunca antes escuchado en sus países.
“Fui echado de Bagdad y viví en Nínive. No puedo regresar a Bagdad y no podemos seguir en Nínive”, dijo Odai, quien huyó de Irak por ISIS.
Odai y otros refugiados recibieron el evangelio de un equipo misionero que viajó junto con un pastor desde Hershey, Pennsylvania. “Dios nos envió para darles un besito Hershey, para mostrarles que este es un beso de amor de Dios para ustedes”, comentó Abby Abildness, una de las misioneras, miembro de Healing Tree International.
“Si tuviéramos tres personas como tú en nuestro país, nunca habríamos sido refugiados y llegado a esta nación”, indicó Odai.
“Sabemos que hay una persona. No sabemos quién es, ni su trasfondo. Pero, él vio alguien que se preocupa por él, alguien quien lo ama y solo abrió su corazón. La crisis lo ha traído a un lugar donde está dispuesto a oír a alguien que cuida de él. Y está dispuesto a oír acerca del Dios que me ama”, comentó Joseph Moussa, pastor de la Iglesia Cristiana Árabe.
Hambre espiritual
“Hemos conocido personas de países diferentes. Aquí están juntos, teniendo comunión juntos en una iglesia y la mayoría son musulmanes que vienen a la iglesia tratando de encontrar más sobre quién es Jesús”, indicó Abby Abildness.
El programa de alcance de Healing Tree International, ya sea en las calles o en este salón alquilado, es parte de un esfuerzo por presentar el Evangelio. “Lo que ocurre mientras ISIS les obliga a huir, es que buscan el fruto del Cristianismo y cómo esto puede ayudarles. Entonces, podemos compartir con ellos abiertamente y quieren oírlo”, expresó Abildness.
Otra persona que recibió el mensaje fue Fados. Ella vivió como una musulmana devota que escuchó que el Corán contenía errores y empezó a investigar otras religiones, como el Cristianismo. “Después de estudiar durante 7 meses, pude ver que el Corán no era correcto y que Mahoma no era enviado de Dios. Solía decir: ‘Señor, no puedo ir hacia ti, pero tú sí puedes alcanzarme. Muéstrame tu camino. ¿Cuál es el camino hacia tí?’”, comentó Fados.
En su lectura de la Biblia, Fados encontró un versículo donde Jesús dice que él es el camino. “¿Cómo sabía que yo buscaba un camino? ¿Cómo sabía que yo buscaba un camino a Dios? Pude ver que Jesús es Dios a través del evangelio”, indicó Fados.
Omar, otro refugiado, tuvo un sueño donde vio a un hombre con una vara que tenía una cruz en un extremo. “Luego, empecé a leer el evangelio y compararlo con el Corán. El verso con el que el Señor realmente me habló y me hizo confirmar mi decisión fue el verso cuando Jesús dice: ‘Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame’. Cuando leí ese verso sentí que se hizo verdad para mí, cuando sostuve esa vara con la cruz y tomé mi decisión… Quiero ser seguidor de Cristo”, indicó Omar.
La iglesia del pastor Raafat Mashraki busca alcanzar refugiados musulmanes y cristianos. “Necesitan sanidad. Ellos necesitan motivación, alguien que se ponga a su lado y les ayude”, expresó Mashraki. “Ellos están lidiando con el dios del Islam y sienten que el dios del Islam les ha abandonado”.
Su iglesia ha ayudado a refugiados cristianos, como Ruba y su hijo Jacob de Siria, quienes huyeron de los peligros de ISIS y otros grupos islámicos. “Una vez cuando él estaba en la calle, había un coche bomba cerca de mi casa. Fue horrible y nuestro hijo no estaba. Salí a la calle y dije: ‘Jacob, Jacob, ¿dónde está Jacob?’ A ninguna madre le gustaría ese sentimiento, esa tristeza y peligro”, indicó Ruba.
“Yo estaba en la calle y el carro explotó… todo. No sé por qué. Mató a cada cristiano. Era para los cristianos. No para los musulmanes. No sé por qué. Pero gracias a Dios estoy aquí, y Dios me ayudó”, comentó Jacob.
El pastor Mashraki indicó que “personalmente, vi con mis ojos, personas que tienen una conexión con ISIS y han cometido crímenes. Pero, aquí disfrutan de una libertad total”.
Abby Abildness, además agregó: “La noticia increíble es que cada vez que ISIS ataque, más cosecha habrá. Hay más personas que quieren huir de eso. Huyen por temor, pero lo que encuentran es el poder milagroso de Dios trabajando por ellos para ayudarles a huir”.
“Bueno, tengo una plegaria para el cuerpo de Cristo en América. Este es el tiempo de orar y este es el tiempo de trabajar entre esta gente. Nosotros, el cuerpo de Cristo, en todo el mundo, creemos que esta es una oportunidad para orar por estos refugiados para que Dios les alcance con su amor y salvación”, dijo Joseph Moussa.