El destacado abogado de derechos humanos David Matas, el ministro del gobierno de China, David Kilgour y el periodista Ethan Gutmann, registraron en un último informe, 712 hospitales en China que realizan trasplantes de hígado y riñón, lo que muestra que la escala de sustracción de órganos es más grande de lo imaginado.

Los cristianos suelen ser las principales víctimas, según expresa Benedict Rogers, vicepresidente de la Comisión de Derechos Humanos del Partido conservador británico. Anteriormente, los tres investigadores, publicaron informes respecto al tema, ahora concluyeron que se trasplantan entre 60.000 y 100.000 órganos cada año en los hospitales chinos

“Los órganos más pedidos son: hígados, riñones, corazón, pulmones, córneas y se obtienen mientras todavía están vivos. Si las víctimas todavía viven en ese momento, son ejecutados. La conclusión final fue que el Partido Comunista de China ha llevado a cabo en el estado, la matanza de inocentes, con el fin de obtener órganos para trasplantes”, concluyeron los investigadores.

El tráfico de órganos se ha producido en un momento en que las autoridades chinas han expresado su preocupación por la propagación del cristianismo. El cristianismo es el grupo que más crece en el mundo y es visto por algunos funcionarios como una amenaza a la ideología atea del Partido Comunista.

Rogers dijo que el documento se produjo luego de una extensa investigación sobre los derechos humanos en China, ahora se ha enviado una petición al Comisionado de Derechos Humanos de la ONU para instar a China a poner fin a la extracción de órganos forzada e iniciar nuevas investigaciones que conducen a la persecución de los implicados.