Después de que un tornado arrasara con la iglesia en Texas la semana pasada, dejando en pie solamente la cruz que colgaba en la pared del santuario, el pastor con ojos llorosos citó Romanos 8:28, declarando que “todas las cosas trabajan juntas para bien”.

La iglesia First Cedar Valley Baptist Church en Salado fue una de las tres iglesias, varios hogares y edificios destruidos por un tornado EF-3 que saqueó y niveló el área el martes con vientos de 165 millas por hora.

La Escala Fujita Mejorada, la cual asigna calificación a los tornados basada en la velocidad del viento que producen, define como EF-3 a un tornado “fuerte” con vientos máximos sostenidos que van desde los 136 a 165 millas por hora que infligen daño “severo”. Los vientos máximos sostenidos de la tormenta del martes estuvieron a solo una milla por hora para calificar como categoría EF-4, un tornado “violento” con vientos máximos sostenidos que van de 166 a 200 millas por hora que inflige daño “devastador”.

“El tornado comenzó en el condado de Williamson, pero el rastro en el condado Bell se estima que es de casi 13 millas de largo con una duración de 30 minutos”., así lo declaró el Servicio Nacional del Clima.

El Gobernador de Texas Greg Abbott emitió el miércoles declaraciones de desastre para los condados de Bell y Williamson, un día después de que el tornado dejara un camino de destrucción en el centro de Texas.

La Iglesia First Cedar Valley Baptist Church fue casi destruida excepto por unas cuantas paredes que apenas quedaron en pie en medio de todos los escombros y una cruz de madera que sigue de pie en la iglesia que desde ese entonces ha sido nivelada hasta los cimientos. La destrucción de la iglesia cinco días antes del Domingo de Pascua no impidió que el Pastor Donnie Jackson llevara a cabo los servicios de Pascua en el lugar.

El sábado, Abbott se unió al pastor y a los miembros de la iglesia, donde también les dio un mensaje de ánimo. “Hace unos días, la iglesia estaba aquí”, dijo él. “La única cosa que queda de la iglesia es esta cruz”.

“La cruz sobrevivió”, añadió Abbott. “El pastor de esta iglesia dejo en claro que la iglesia sobrevive porque la iglesia es mucho más que un edificio. La iglesia es las personas que se congregan en ese edificio, las personas que se reúnen”.

En una conferencia el sábado, Jackson elaboró en lo que el veía como un milagro de Dios: “Quiero hacer un punto sobre algo. A la entrada teníamos una cruz colgada en la pared. En el santuario entre las puertas, todo fue destruido, pero esa cruz nunca fue tocada”.

Abbott y los oficiales de Texas reunidos en una conferencia aplaudieron mientras Jackson proclamaba: “Mañana por la mañana, vamos a tener el servicio en la losa”.

“Ese edificio se fue, pero la iglesia esta mas fuerte que nunca, y se que Dios nos ayudará a reconstruir incluso mas fuertes que antes”, dijo Jackson. “En el espíritu de celebrar la

resurrección de Jesucristo, vamos a celebrar la resurrección” de la iglesia First Cedar Valley Baptist Church.

A pesar de que muchos de los escombros que consistían en los restos de la iglesia habían sido quitados para la conferencia de prensa del sábado y los servicios de Pascua del domingo, la transmisión de WFAA afiliado de ABC News, mostró como se veía la iglesia poco después de que el tornado arrasara la comunidad al centro de Texas. Los reportes noticieros mostraron que la cruz estaba perfectamente intacta entre los escombros y el techo derrumbado con el aislamiento rosa expuesta que habían caído encima del candelabro.

“¿Sigue anclada? No ha sido dañada. ¿Qué te dice eso?” preguntó Jackson.

“Algunas veces quieres cuestionar por que suceden las cosas de esta forma, y entonces una de las escrituras que viene a mi mente es la que dice: ‘Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados,’” dijo Jackson. “No tengo idea de cuál es el propósito de Dios al permitir que sucediera esto, pero se que Él tiene uno”.

Aparte del tornado que causo la destrucción en First Cedar Valley Baptist Church, la tormenta que pasó por el condado Bell la semana pasada produjo una gran cantidad de granizo. Uno de los granizos tenía un diámetro que media 5.676 pulgadas en su diámetro máximo, casi rompe el récord de el granizo más grande registrado en Texas, el cual tenía un diámetro de 6.4 pulgadas.

El daño causado por el tornado de la semana pasada se extendió más allá de First Cedar Valley Church. En la conferencia de prensa, Abbott explicó que a pesar de que 70 hogares y otras dos iglesias habían sido destruidas por la tormenta, no hubo perdida de vidas debido al clima severo.