La mujer ha demostrado a lo largo del tiempo que tiene la sazón de ser y ejercer influencia, sobre los lugares y espacios en los que se encuentre. Su belleza no está solo limitada a lo exterior de su ser, sino que su esencia se halla en la elegancia de su espíritu y en la mirada que tiene sobre la vida.
La mujer influyente es aquella con la capacidad de relacionar sus realizaciones personales con la perspectiva del otro. El liderazgo que ejerce, gracias a su capacidad empática facilita la ayuda a su entorno, colaborando y ayudando a otros que se encuentran temerosos de su capacidad, influyen a tal punto de hacer comprender que todos podrán abordar con eficacia sus tareas. Esa fuerza en ellas, se encuentra situada en su espíritu, en la tenacidad que las hace insistir, perseguir y no darse por vencidas ante cualquier situación que se les presente.
Tal vez pienses ¿Pero qué tipo de liderazgo puedo ejercer, si no trabajo para una gran empresa, si no tengo gente a mi cargo; tampoco tengo la dinámica de trabajar y relacionarme con quienes desconozco? La respuesta que voy a darte va a dejarte sorprendida tal vez, y puede hasta generar expectativas en vos, pero “en todo tiempo estás ejerciendo influencia sobre otros”.
Te comparto brevemente la historia de una mujer llamada María, ella fue una joven sencilla, fue escogida para una misión: ser la madre de Jesús. Ella no rechazó esa misión, sino que la aceptó con fe. Con seguridad e influencia, ayudó a educar a Jesús, y años más tarde lo vio resucitado en gloria. Lucas 1:38. María tuvo un espíritu tenaz, lleno de amor y fue de influencia y cuidados en la vida de Jesús, no pensando solamente en el presente que le tocaba vivir, sino en que al paso de los años fuera el hombre que cumpliese con la asignación que le dio el Padre, Dios.
Mujer, tu influencia será tan grande sobre quienes te rodean que habrá resultados que verás tal vez a la brevedad, pero otros que serán el resultado de tu empatía, de una mano solidaria, de un dar sin esperar a cambio que se verá reflejado en tus generaciones venideras.
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