Aminty Printing es la mayor fábrica de Biblias en el mundo y está en China, un país oficialmente ateo. Esta industria está a cargo de una ONG cristiana, cuyos 600 trabajadores realizan 70 Biblias por minuto y alrededor de 18 millones por año. La Fundación Amity, una organización cristiana local, y Sociedad Bíblicas Unidas, un grupo que difunde la doctrina cristiana, son quienes idearon este proyecto.
«La mitad de nuestra producción está dirigida a cristianos chinos y la otra mitad al exterior. Publicamos Biblias en cerca de 90 idiomas y las enviamos a 70 países, incluidos España y América Latina», expresó Vivian Wei Zheng, una de las directivas de la Fundación Amity.
La señora Ma, que trabaja en Amity, recuerda que en 1967, al comienzo de la Revolución Cultural, la iglesia de Monchou Road de Nanjing fue confiscada. “La convirtieron en una imprenta del Libro Rojo de Mao Zedong”, explicó Ma. En aquel entonces, los Guardias Rojos se dedicaban a confiscar y quemar Biblias y el Libro Rojo era el único referente ideológico.
Para Vivian Wei Zheng, Amity es el resultado de la nueva realidad que vive China. “Cuando tienes satisfechas las necesidades materiales buscas algo más. Hay chinos que han decidido rezar al dinero, que sólo creen en el poder de la riqueza. Otros, como nosotros, persiguen algo más cercano, que les satisfaga sus necesidades espirituales, la respuesta está en la Biblia”, explicó Vivian.
