Los hogares de muchos cristianos están transformando el paisaje de las provincias en China con la difusión de cruces  que tanto molesta al gobierno comunista, debido a su imposición por quitar los símbolos cristianos de las iglesias.

Por lo cual, a medida que el gobierno trata de encontrar una solución, los cristianos preparan cruces de madera colocándolas en sus casas y carros. Un líder cristiano Zheijiang dijo que “Cada vez que derriben una cruz, nosotros vamos a colocar una nueva y haremos florecer la cruz por toda China”, aseguró.

Algunas comunidades cristianas dispersas en toda China, están ganando fuerza, logrando unir a diferentes entidades y liderar una protesta contra las medidas del gobierno en defensa de la fe; que a pesar de las restricciones en el continente asiático, cristianos siguen aumentando y se calcula que en el año 2050 China podría convertirse en el país con mayor número de ellos.

La lucha continúa y el número de cristianos sigue creciendo. En Zeijiang hay más de 210.000 cristianos y la provincia de Wenzhou cuenta con 120 mil miembros, es decir, el número de creyentes es mucho mayor de lo que piensan las autoridades locales.