China ha anunciado su decisión de continuar con la sentencia de prisión para un Pastor de Carolina del Norte por «organizar cruces ilegales de la frontera» – un crimen más comúnmente aplicado a los traficantes de humanos – a pesar de su apelación.

El Pastor John Cao quien junto con su compañero un maestro cristiano, presuntamente cruzaron la frontera China-Myanmar en marzo pasado, hicieron una apelación por ser sentenciados erróneamente de «organizar cruces ilegales de la frontera» en el 2018.

Después de posponer varias veces la audiencia de Cao, una corte en la provincia Yunnan de China anunció el 25 de julio que había decidido continuar con la sentencia, así lo reportó el grupo vigia de persecución International Christian Concern.

De acuerdo a China Aid, la corte estaba «rodeada de una gran presencia policiaca», la cual también hizo notar que se le permitió a la madre de Cao quien tiene 83 años y su hermana, junto con su abogado estar presentes durante la audiencia del veredicto.

Cao, un residente permanente de Estados Unidos de Greensboro, Carolina del Norte, y su compañero de trabajo, Jing Ruxia, fueron arrestados después de regresar a China provenientes del país vecino de Myanmar el 5 de marzo del 2017.

Los dos hombres se habían voluntariado para enseñar en 16 escuelas al norte de Myanmar las cuales sirven a más de 2,000 estudiantes. Cao había estado viajando de ida y vuelta a través del río que divide los países por más de tres años sin ningún rechazo por parte del gobierno.

Antes de su arresto, Cao pudo tirar al agua su teléfono celular mientras que estaba regresando en lancha de la provincia Yunnan como parte de sus esfuerzos de construcción de escuelas. Sus acciones lograron proteger a otros 50 maestros cristianos.

A pesar de la falta de evidencia, Cao fue sentenciado a prisión por una corte China mientras estuvo retenido por un año después de su arresto. El fiscal sólo entregó como evidencia los testimonios escritos de testigos, y al Pastor se le negó la oportunidad de interrogar a los testigos o de proveer evidencia de refutación, esto de acuerdo a ACLJ.

El último veredicto de la corte llega después de que los abogados de Cao recibieron una notificación el 12 de julio, indicando que la apelación del pastor sería llevada solamente via «sesión de juicio en papel», en vez de una audiencia real.

El año pasado, Jamie Powell, la esposa de Cao, habló en el primer Ministerial Para Promover La Libertad Religiosa del Departamento de Estado en Washington, D.C., donde dijo que su esposo estaba «propenso para su arresto debido al trabajo de su trabajo impulsado por su fe cristiana».

«Desde su arresto, mi esposo ha sufrido un declive rápido en su salud», dijo ella. «Él ha perdido 22 kilos. No ha podido comunicarse conmigo y mis hijos. Mis hijos y yo viajamos para allá – 10,000 millas – y no se nos permitió verlo».

«Los siete años que ha recibido injustamente ahora se vuelven un asunto de salud y sobrevivencia».

Gina Goh, la Gerente Regional de ICCs para el Sureste de Asia, dijo que un juicio injusto y cargos inventados contra Cao «una vez más demuestran la indiferencia de la regla de la ley y la libertad religiosa en China».

«Las medidas energéticas de Beijing contra la cristiandad no deberían ser toleradas o ignoradas», dijo Goh. «La comunidad internacional debe continuar hablando por las iglesias oprimidas y los cristianos para que su sufrimiento pueda terminar».

China está calificada como la peor nación en el lugar número 27 en cuanto se refiere a persecución cristiana, de acuerdo a la lista World Watch de Puertas Abiertas USA. El grupo vigia de persecución ha descrito la situación que enfrentan los cristianos en China como la peor desde la Revolución Cultural y ha llamado a Asia «el nuevo semillero de persecución para cristianos».