Al menos 70 personas, en su mayoría niños, han muerto en un masivo ataque suicida en Lahore, Pakistán, el domingo de Pascua. El atentado se lo adjudicó Jamaat-ul-Ahrar, una facción del grupo extremista Talibán.

Aunque poco conocido, Jamaat-ul-Ahrar opera desde 2014 y ha realizado varios ataque letales en el país asiático de mayoría musulmana.

Otras 300 personas resultaron heridas en la explosión de la bomba, la cual fue detonada en un parque en Lahore, cerca de un parque infantil, que estaba lleno como de costumbre, por la minoría de la población cristiana que celebra la Pascua, informó la BBC.

Los grupos de vigilancia mundial han llamado a una respuesta por parte del mundo occidental, preguntando por qué la atención sólo se centra en los ataques terroristas en los EE.UU. y Europa, y no en otras partes del mundo.

«El atentado suicida de hoy en Pakistán, fue dirigido específicamente a los cristianos que celebran la fiesta de Pascua, es uno de los innumerables ejemplos de la escalada de la persecución mundial contra los cristianos. Cada vida perdida es preciosa. Estoy decepcionado de que el mundo occidental sólo parece prestar atención cuando los ataques se producen aquí en Occidente. Las vidas perdidas en África, el Medio Oriente o el Sudeste de Asia son tan valiosos como las que se perdieron en Europa o Estados Unidos. Debemos estar igualmente indignados por ambas pérdidas, » dijo David Curry Presidente de Open Doors en un comunicado.

Un testigo explicó que el parque estaba tan abarrotado de gente que era muy difícil entrar en la muchedumbre.

«Fuimos a un restaurant a comer algo, cuando de repente hubo una gran explosión», dijo el hombre.

«Todo el mundo entro en pánico, corriendo para todas las direcciones. Muchos de ellos fueron bloqueados en la puerta del parque. Los cadáveres se podían ver en todas partes.»

Un portavoz del grupo terrorista Jamaat-ul-Ahrar dijo que el ataque contra los cristianos era un desafío directo al gobierno.

«El objetivo eran los cristianos,» dijo el portavoz Ehsanullah Ehsan. «Queremos enviar este mensaje al primer ministro Nawaz Sharif, que hemos entrado en Lahore.»

Wilson Chowdhry, presidente de la Asociación Británica cristiana de Pakistán, ha explicado que los cristianos paquistaníes tienen una larga tradición de celebrar la Pascua, y dijo que los atacantes tenían como objetivo atacar a los niños.