Fragmentos de un rollo bíblico han sido descubiertos por arqueólogos en la Reserva Natural del Desierto de Judea.
Es la primera vez en 60 años que excavaciones arqueológicas dan como resultado el descubrimiento de rollos bíblicos.
El rollo data del periodo Bar Kokhba en el siglo II A.C. y está escrito en griego. Los fragmentos contienen porciones de los Profetas Menores, incluyendo el libro de Zacarías y Nahum.
La Autoridad Israelí de Antigüedades (IAA) dijo que los fragmentos han sido escritos por dos escribas diferentes.
Estas piezas fueron descubiertas junto al esqueleto de un infante que parece tener una antigüedad de 6.000 años. El esqueleto parece pertenecer a una niña, estaba envuelto en un sudario y momificado, además había una serie de monedas.
El descubrimiento fue hecho por el IAA como parte de una operación nacional para prevenir el deterioro y el robo de antigüedades en el Desierto de Judea, lo que ha sido un problema desde el descubrimiento de los rollos del Mar Muerto hace 70 años.
«El objetivo de esta iniciativa es rescatar estas raras e importantes herencias históricas de ladrones y del deterioro», dijo el director de IAA, Israel Hasson.
«Los nuevos fragmentos de rollo descubiertos son un llamado de atención al Estado. Se necesitan recursos para completar el rescate en esta importante e histórica operación.»
«Debemos asegurar que recuperaremos todo lo que aún no ha sido descubierto en las cuevas, antes que los ladrones lo hagan. Algunas cosas tienen un valor incalculable.»
«El equipo que trabajó en el desierto demostró un coraje excepcional, dedicación y devoción al propósito, al investigar en las cuevas entre el cielo y la tierra, todo para recuperar estos regalos de inmensurable valor.»
Este reciente descubrimiento recuperó docenas de fragmentos, algunos de los cuales contienen partes de Zacarías 8:16-17 «Estas son las cosas que habéis de hacer: Hablad verdad cada cual con su prójimo; juzgad según la verdad y lo conducente a la paz en vuestras puertas. Y ninguno de vosotros piense mal en su corazón contra su prójimo, ni améis el juramento falso; porque todas estas son cosas que aborrezco, dice Jehová.»
Otros fragmentos contienen Nahúm 1: 5-6, «Los montes tiemblan delante de él, y los collados se derriten; la tierra se conmueve a su presencia, y el mundo, y todos los que en él habitan. ¿Quién permanecerá delante de su ira? ¿y quién quedará en pie en el ardor de su enojo? Su ira se derrama como fuego, y por él se hienden las peñas.»
Inusualmente, aunque la mayoría de los textos están en Griego, el nombre de Dios aparece en Hebreo Antiguo, conocido de los tiempos del Primer Templo en Jerusalén.
El IAA, que catalogó este último descubrimiento como «impresionante», dijo que los fragmentos fueron descubiertos en una cueva al costado de un acantilado escarpado dónde se escondieron refugiados judíos hace 1900 años.
Avi Cohen, CEO del Ministerio Jerusalén y Herencia, dijo que se encontraba ‘muy entusiasmado’ al respecto.
«Sin la consistente y coordinada acción de varias oficinas gubernamentales, la Autoridad Israelí de Antigüedades y la Administración Civil, estos descubiertos especiales no podrían ser accesibles al público, sino que talvez hubieran caído en manos de mercaderes de Antigüedades.»
«El Ministerio seguirá siendo parte del proyecto, para así completar el mapeo de las cuevas para descubrimientos similares.
«La continuación del proyecto incluye la combinación de extraordinarios profesionales y tecnología avanzada, y estamos orgullosos de esta cooperación única, que celebramos.»
Fuente: Christian Today