A partir de mañana, viernes 6 de enero, un grupo de andinistas intentarán alcanzar la cumbre del cerro Aconcagua, que con sus 6.962 metros es la más alta de América. La misma está ubicada en el departamento de Las Heras y forma parte del Parque provincial Aconcagua. Además integra la cadena montañosa denominada Cordillera Principal. Hasta allí un equipo de GDP Salud aspira llegar. Contará entre sus filas a Federico Orellano y Pablo Infante, quien es uno de los fundadores del Proyecto 30 Cumbres de Paz por Argentina. Además es miembro de la comunidad de Fe de la Iglesia de la Alameda, y miembro de la Fundación No Más Violencia, cuya organización este año festeja su 20° aniversario. Asimismo esta iniciativa cuenta con el apoyo de la Juventud Evangélica Bautista Argentina (JEBA). Acompañan a los mencionados Alejo González, Hugo González, Ezequiel Romero, y Gastón Rinaldoni. La delegación en total suma 28 personas, de los cuales 22 llegarán hasta las bases de Plaza Francia y Plaza de Mulas.
«Este proyecto de 30 Cumbres de Paz por Argentina surgió con el fin de darle visibilidad a lo bueno. A aquellas acciones que traen paz y reconciliación de la sociedad. Todos los días recibimos mensajes que nos inducen a la violencia, fortaleciendo la división, el rencor y el odio. Es por eso que pensamos en levantar la bandera de No Más Violencia en las montañas, ya que así como en la vida diaria se necesita mucho esfuerzo para cambiar conductas y paradigmas culturales que han alimentado a la violencia, la montaña requiere entrenamiento, una alimentación adecuada, aprender a soportar el dolor, entender que todo es parte de un proceso y que la cumbre conseguida es parte de la superación y de entender que se puede, si creemos que podemos lograrlo porque al levantar la bandera que justamente es poner en lo más alto, le estaremos dando mayor fuerza al mensaje de No Más Violencia,» señala Infante.
«En el comienzo de este camino los voluntarios de la Fundación recorrimos un sendero de desafíos y muchísimo aprendizaje. La montaña como tal, exige respeto, exige todo, llámese conciencia, fortaleza, y cuidado. Le dimo un número al Proyecto Cumbres de Paz, porque representaba ese número lo mucho que hay que trabajar para erradicar y fortalecer el mensaje y hoy nos encontramos ya con 20 cumbres coronadas y a las puertas de un sueño que atesoramos como equipo, «agregó.
En la Fundación los jóvenes voluntarios de «No Más Violencia» que colaboran con la iniciativa por todo el país tienen como propósito llevar un mensaje de paz, acentuando valores y principios que ayuden a construir un mejor mañana, no sólo para Argentina sino para la comunidad mundial, ya que reciben invitaciones de otros países creando un desafío que ellos ven como una oportunidad. Muestra de ello es que algunas de las etapas de No Más Violencia se están ejecutando en Uruguay, Estados Unidos, Venezuela, EL Salvador, Honduras, España e Italia.
A nivel nacional la Fundación trabaja en áreas como No Más Violencia en espectáculos deportivos, Acción Barrial, Reconciliación con las autoridades (capellanía) y No Más Violencia va a la escuela. Esta última a reaís de su eficaz mensaje fue declarado de interés educativo por el Ministerio de Educación, Ciencia y tecnología de la Nación, según la Resolución n°1310. Los materiales con los cuales se trabaja sustentan la visión de que la educación es una herramienta invalorable para preparar una nueva generación que sepa compartir valores como la solidaridad, el perdón y la restauración.
Volviendo a los preparativos de la Cumbre esta dará inicio el viernes 6 y se extenderá al día 22. «Viviremos un tiempo para prepararnos para acceder a la cumbre. Muchos estamos postergando vacaciones , pero creemos firmemente que este sueño que acariciamos de una Argentina en Paz es posible, así como los invitamos a través de facebook (página de Pablo Infante), donde ustedes tendrán un diario de la expedición, contando el día a día de la expedición y las vivencias de sus integrantes.
Así que en los primeros días tendremos noticias de estos jóvenes, de estos hombres que se atreven a ir por más a desafiarse y a desafiarnos a vivir en una sociedad sin violencia, cuántas cumbres tendrán que subir hasta que lo comprendamos, nadie lo sabe. Sin embargo ellos lo intentaran una y otra vez, al fin y al cabo para el que cree todo es posible.