De acuerdo a una encuesta reciente, casi dos tercios de los cristianos americanos se sienten incómodos para regresar a la iglesia para los servicios en persona debido a las preocupaciones por el Coronavirus.
El American Enterprise Institute condujo una encuesta de 3.504 americanos desde finales de mayo a junio, donde se les preguntaba sobre su nivel de comodidad al regresar a la iglesia.
Entre los encuestados, 64% dijo que estaban ya sea «un poco incómodos» o «muy incómodos»con el hecho de regresar a la iglesia para servicios en persona.
«La gente está equivoca e insegura sobre si se sienten cómodos para asistir», le dijo Daniel Cox, quien supervisó el estudio, a The Associated Press and Religion News Service.
«Estamos viendo entre los laicos un número considerablemente grande de incomodidad al regresar a las prácticas religiosas formales en persona».
Aunque la mayoría de la muestra de la encuesta se siente incómoda, la encuesta de AEI encontró una varianza considerable en las respuestas de clasificación racial y religiosas.
Los evangélicos Protestantes blancos eran los más cómodos para asistir a los servicios, con el 61% que indicó ya sea «muy cómodos» o «algo cómodos» para asistir.
En contraste, solo el 26% de los encuestados Católicos Hispanos dijeron que estaban ya sea «muy cómodos» o «algo cómodos» con asistir a los servicios en persona.
Entre los Protestantes negros, el 42% dijeron que estaban «muy cómodos» con asistir, lo cual fue el mismo porcentaje de encuestados quienes se identificaron como «no principalmente de religión cristiana».
Los encuestados quienes se identificaron como «sin afiliación» fueron los que con el 66% dijeron que estarían «muy incómodos», y solo el 8% de ese grupo dijo que estarían «muy comodos».
En respuesta a el contagio del Coronavirus, la vasta mayoría de iglesias en los Estados Unidos optó por cerrar sus puertas, con la mayoría llevando a cabo sus servicios de adoración exclusivamente en línea.
Conforme los estados comienzan a abrir, muchas iglesias han hecho lo mismo, muchas de ellas con medidas de seguridad, incluyendo distanciamiento entre los asistentes, prohibiendo el contacto físico, y promoviendo el uso de mascarillas para la cara.
Fuente: The Christian Post